Autores: Gerret von Nordheim, Tina Bettels-Schwabbauer y Paula Kennedy
El escaso interés de los medios de comunicación europeos en relación con las noticias de la Unión Europea (UE) ha supuesto -y supone- el mayor obstáculo para el surgimiento de una esfera pública europea. Sin embargo, hoy también debemos considerar si centrarse en las cuestiones europeas es necesariamente sinónimo de reconocer la conveniencia de una identidad europea común, lo que en este contexto podríamos denominar convergencia.
¿Podría este enfoque tal vez indicar una tendencia negativa? Políticos populistas como Boris Johnson, Viktor Orbán y Matteo Salvini utilizan a menudo a la UE y a sus representantes como objetos de burla en su impulso por generar antagonismo hacia la idea de una Europa unida. Sin embargo, si bien la obsesión de los populistas por la UE ayuda a garantizar que los temas de nuestro entorno dominen regularmente la agenda de los medios de comunicación en sus respectivos países, esto no es exactamente lo mismo que crear una esfera pública europea.
Las elecciones de 2019 al Parlamento Europeo estuvieron dominadas por el Brexit, que fue la mayor amenaza para la unidad de la UE desde sus inicios. Esta fue una elección de extremos: nunca había sido mayor la participación de votantes y nunca el parlamento resultante había estado tan fracturado. Esta votación histórica brindó la oportunidad de evaluar el estado de la esfera pública europea y observar los diferentes tipos de cobertura de los medios.
Enfoques de medios divididos
En nuestro estudio, distinguimos entre la europeización horizontal (la medida en la que otros países de la UE y sus líderes políticos aparecen en la cobertura mediática de los países miembros) y la europeización vertical (la medida en que la cobertura de los medios se centra en la propia Unión Europea – sus instituciones, políticos, etc.).
Adoptamos un enfoque de dos etapas para evaluar y comparar estos diferentes tipos de cobertura de los medios. La primera etapa implicó el análisis de 57.943 artículos sobre las elecciones de la UE, utilizando algoritmos para identificar los temas que discutieron. Los artículos fueron extraídos de una variedad de medios de comunicación influyentes en los países considerados: Alemania, Hungría, Italia, Polonia, Portugal, República Checa y Reino Unido. Los mapas de temas generados como parte de este proceso fueron luego analizados por un equipo internacional de investigadores de la red del Observatorio Europeo de Periodismo (EJO). Los resultados del análisis algorítmico se interpretaron teniendo en cuenta el contexto particular de los países individuales: sus discursos y narrativas políticas predominantes, la situación política y cultural general, etc. El objetivo era combinar los resultados relativamente objetivos producidos por los algoritmos con los conocimientos de los expertos del país.
Cobertura `horizontal` vs `vertical`
El estudio confirma que los dos tipos diferentes de cobertura mediática, la europeización horizontal y vertical, tal como se definen anteriormente, son fenómenos distintos y deben considerarse por separado. Parecen asumir funciones diferentes dentro de los ámbitos públicos estudiados, como se ilustra en las tablas. Sin embargo, si miramos los resultados de las encuestas de opinión pública del Eurobarómetro, realizadas en la primavera de 2019 para establecer el nivel de aprobación de la membresía de la UE en varios países, comenzamos a ver un patrón emergente.
El primer descubrimiento sorprendente es que los países donde se registraron los índices de aprobación más altos para la UE (Portugal (69%) y Alemania (76%)) son también los países que tienen la mayor proporción de cobertura mediática de orientación horizontal. Por tanto, el interés en otros países de la UE parece estar asociado a una actitud positiva hacia la UE en general. Se puede considerar que Portugal y Alemania representan públicos de la UE que, en general, se identifican con los valores europeos y, por tanto, podrían calificarse de convergentes.
por otra parte, los países con los índices de aprobación más bajos para ser miembro de la UE son la República Checa (33%) e Italia (36%). Son aquellos cuyos medios tuvieron el menor grado de referencias verticales. En su cobertura de las elecciones de la UE, estos países prestaron poca atención a la propia UE, sus instituciones y representantes; en cambio, la atención se centró principalmente en cuestiones nacionales. En general, la República Checa e Italia representan un grupo de públicos menos internacionalizados que podrían describirse como orientados al Estado-nación.
El tercer grupo se caracteriza por una calificación de aprobación promedio (Reino Unido: 43, Hungría: 61, Polonia: 68, promedio de la UE: 61). Otra cosa que estos países tienen en común es que la cobertura mediática de la UE exhibe la mayor discrepancia entre los valores de europeización vertical y horizontal, con temas verticales que superan con creces a los horizontales.
Más que en la mayoría de los otros países estudiados, los medios de comunicación húngaros, polacos y británicos describen a la UE como una entidad monolítica, especialmente en el contexto de los conflictos entre estos estados miembros y la Unión Europea. Se presta muy poca atención a otros dentro de la comunidad. Esta característica se ve más pronunciada en Hungría y Polonia, donde la prensa a menudo refleja la opinión del gobierno crítico de la UE. Una marcada diferencia en los grados de europeización vertical y horizontal se asocia a una actitud de confrontación hacia la UE.
Esta clasificación de países convergentes, orientados al estado-nación y confrontativos, no está directamente relacionada con sus sistemas de medios. Sin embargo, cabe destacar que Hungría y Polonia, los países de nuestro grupo con los niveles más bajos de libertad de prensa (según el Índice Mundial de Libertad de Prensa de Reporteros sin Fronteras 2019), pertenecen a la categoría de confrontación, mientras que Alemania y Portugal, los países con niveles más altos de libertad de prensa, son convergentes.
Los resultados de nuestro estudio sugieren que la europeización de los medios de comunicación no es necesariamente algo bueno. La cobertura de confrontación es una especie de europeización populista: centra la atención en la UE, pero al mismo tiempo despierta sentimientos antieuropeos y, por lo tanto, contribuye a una polarización generalizada. En el contexto de los acontecimientos recientes, especialmente el referéndum del Brexit, se puede hablar de una europeización tóxica que proyecta una imagen de una élite de Bruselas como una entidad ajena. Esto contrasta fuertemente con la información proeuropea, que se basa en las perspectivas de diferentes países miembros y, por lo tanto, contribuye a una identidad europea común.
Acceda a la publicación completa en la Revista Mediterránea de Comunicación: “ El estado de la europeización: entre choque y convergencia. Una comparación de la cobertura mediática de las elecciones europeas de 2019 en siete países ”.
Autores de la revista: Gerret Von Nordheim, Tina Bettels-Schwabbauer, Philip Di Salvo, Paula Kennedy, Kornélia R. Kiss, Michal Kús, Ana Pinto Martinho, Sandra Stefanikova y Décio Telo.
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Traductor: Luis López
Etiquetas BREXIT, Europa, periodismo europeo, UE, Unión Europea